Fecha: 11 de Junio del 2014
El tabú hacia la muerte en la sociedad y su inexistencia, tanto en los currículos de Formación del profesorado y Educación como en los fijados por las leyes educativas de nuestro país, genera un olvido a la hora de formar a docentes y alumnos en la pedagogía y comprensión de la muerte. Ésta parece no tener lugar en la escuela, a pesar de que es un aspecto ineludible de la vida y de que sí se enseñan otros muchos valores y competencias.
Es por ello que se hace necesario que los docentes conozcamos cómo se debe intervenir ante el sufrimiento y el duelo del alumnado atendiendo a su psicología evolutiva, cuáles son las reacciones naturales de los niños ante la muerte y el duelo y qué actividades se pueden programar en el aula para trabajar la Pedagogía de la Muerte.
La intención última ha de ser la de ayudar al alumnado a alcanzar su desarrollo integral proporcionándole una respuesta educativa acorde a sus necesidades.