La inteligencia emocional está ocupando un papel muy importante en la educación de los niños debido a las investigaciones en neurociencia que se están realizando. Los primeros años de vida de un niño son los que marcan los patrones emocionales y los que determinan en gran medida el éxito o el fracaso que ese niño tenga el día de mañana.
En este trabajo de investigación, la educación de las emociones se realiza a través de la música. Para ello se han elaborado una serie de propuestas didácticas en las que se trabajan diferentes capacidades emocionales con el propósito de entre otras cosas, aumentar la autoestima de los niños y su sociabilidad expresando y vivenciando sus sentimientos.